
Ciudad de México.
Ciudad Universitaria.
Estadio Olímpico Universitario.
La Universidad Nacional Autónoma de México, abría sus puertas para darle paso al que quizás sea un capítulo más de gloria en los anales auriazules, en virtud que los nóveles Pumas menores de 17 años jugarían la final de la categoría ante la escuadra coahuilense del Santos Laguna.
La mesa estaba puesta, la alfombra roja recibía a los jóvenes que a su corta edad, ya sabe lo que es pelear por cosas importantes deportivamente hablando, defendiendo a la institución que confió en ellos para representarlos.

La cita para jugar la esperada final era en el glorioso estadio del Pedregal de San Ángel, al sur de la Ciudad de México.
El Técnico de los auriazules, Miguel Ángel «Iguala» Carreón, mandó a la cancha a su 11 inicial con la consigna de escudriñar al rival y sacar ventaja a como diera lugar para viajar a Torreón con una ventaja, y su equipo le supo responder.
Apenas silbó el Nazareno Dennis Ávila el inicio de las hostilidades y los pumitas se abalanzaron al frente, y tanto fue la insistencia que al minuto 14, un contragolpe y centro por derecha fue encontrado en el aire por la testa del medio ofensivo Jhostyn Cortés para mandar el esférico a guardarse en el fondo de las mallas y así ponerle número a la casa al son de 1-0.


El «México ’68» explotaba con la poca asistencia que se dió cita en el graderío puesto que todo parecía iría viento en popa.
Y así parecería, ya que al minuto 37′, un pase a profundidad por el centro del campo fue recibido y ejecutado por el centro delantero José Mancilla para ampliar la ventaja a 2-0 y sentir más cerca el sabor del triunfo.


Pumas era un vendaval en todo el primer lapso, pero fue todo el daño que pudo lograr y así se fueron al descanso.
El segundo tiempo las incidencias fueron todo lo contrario a lo sucedido primeramente, ya que el Santos se fajó y respondió.

Por más que quiso e intentó, no pudo, los esfuerzos eran en vano en virtud que la zaga universitaria se amarró con ganas, hasta que al minuto 82′ cometieron una falta en el área de los capitalinos y se marca falta y penal a favor de los Guerreros laguneros.
El encargado de cobrar fue el heredero del «Toro» Vuoso.
Al 84′, Lucca Joel Vuoso cobró de manera magistral para poner el 2-1 definitivo en esta primera cita.

El Colegiado marcó el final del juego y dejó abierta la llave para definir absolutamente todo en el empastado del T.S.M., allá, en la Comarca Lagunera de Coahuila y Durango, aunque con una ligera ventaja para los jóvenes universitarios sobre los muchachos albiverdes para la vuelta.
